Ábaco y caja Mackinder en Educación Matemática
Para comenzar creemos necesario aclarar en qué consiste el Ábaco y la caja de Mackinder.
El Ábaco fue unos de los primeros dispositivos mecánicos que se utilizó para contar, y surgió producto de la insuficiencia de otras herramientas que se usaban primitivamente, como por ejemplo, los dedos de las manos. Actualmente, su forma más habitual consiste en varillas paralelas puestas en una base rectangular. A las diversas varillas corresponden diferentes unidades de valor, por ejemplo: “unidades”, “decenas”, “centenas”, y “unidad de mil”. En cada varilla se insertan, por ejemplo, argollas para representar cantidades, y se pintan de un color para diferenciarlas de las demás varillas o unidades de valor.
La caja de Mackinder es un instrumento que consiste en diez receptáculos menores que se encuentran alrededor de uno mayor, dispuestos en una base plana. .Los receptáculos menores poseen elementos que representan cantidades unitarias, las cuales se van depositando en el receptáculo mayor haciendo referencia que la multiplicación es la suma progresiva de esos elementos, y a la inversa con la división.
Estos instrumentos se utilizan, principalmente, en el nivel de enseñanza básica cuando se enseña a sumar y restar como en el caso del Ábaco; multiplicar y dividir en el caso de la caja de Mackinder, sin perjuicio, de que esta última también se pueda usar para sumar y restar.
¿En qué niveles creen que es conveniente utilizar estos instrumentos? ¿porqué?.
¿Estos instrumentos pueden ser utilizados en cualquier institución educativa? ¿porqué?.